El pasado jueves 15 de junio, posterior a que el Consejero Territorial Sebastián Venegas (College) anunciara su ida del movimiento Avanzar —movimiento bajo el cual fue electo en las Elecciones FEUC 2023—, se han hecho públicas disputas financieras y políticas que han derivado en que haya renunciado la mayoría de la coordinación del movimiento, más de 30 militantes y varios representantes de distintos territorios y centros de estudiantes. Hasta el momento, el movimiento ha declarado su compromiso por mantenerse articulado y “ver esta situación como un aprendizaje y una invitación a seguir mejorando”. Prontamente habrá nuevas elecciones de Coordinación.
“Como Excoordinador y Excandidato FEUC, lamento el destino de Avanzar. Fuimos una gran comunidad, y lo intentamos todo”, fueron las palabras con las cuales Felipe Carrasco, quien fue Coordinador General del movimiento de centro liberal hasta el pasado viernes 16, se refirió a la crisis de articulación que estaba viviendo el colectivo político liberal. Y es que, después de que Sebastián Venegas decidiera abandonar el movimiento —dejando a Avanzar sin consejerías territoriales—, se publicaron distintas polémicas internas que generaron que distintos estudiantes pronosticaran lo ocurrido como el fin del colectivo fundado el 2017. Sin embargo, días después de los sucesos, el movimiento ha buscado reafirmar su vigencia política.
Desde El PUClítico se realizó una investigación del caso de cómo el movimiento liberal de la UC pasó de momentos de crisis por la ida de muchos de sus integrantes a, según declaran, resolver la situación “con la cooperación de todos nuestros miembros”.
Inicios de la turbulencia
El problema inicial comenzó a finales de abril en donde, tras la presentación de cuentas financieras en una reunión general de movimiento (también denominada Minga) que tuvo lugar el 28 de abril. Al día siguiente (sábado 29 de abril), el Coordinador Interno del movimiento, Baltazar Dulcinelli, interpuso una denuncia al resto de la Coordinación por presuntas irregularidades financieras.
Concretamente, días previos a la reunión general del movimiento, la Coordinación se encontraba sin saldo ni fondos en sus cuentas. Dado que desde la Coordinación esperaban con seguridad recibir una donación externa de 60 mil pesos los días posteriores a la Minga, se acordó incluir dicho monto al momento de presentar el estado financiero del movimiento. Para poder mostrar de manera efectiva aquel dinero en las cuentas, la Coordinadora Externa del movimiento depositó los 60 mil pesos extra, tal que cuando se recibiera la donación se devolviera el dinero. Finalmente, el día de la minga, la Coordinación presentó una cuenta con 60.000 pesos, en la cuál no se detallaron ni los activos ni los pasivos financieros.
Ocurrido el suceso, Dulcinelli, quien se opuso a que se incluyeran los 60 mil pesos, interpuso una denuncia al resto de los integrantes de la Coordinación a través de los canales institucionales del movimiento. La denuncia, levantada el día siguiente de que se haya realizado la Minga, clasificó de “fraude” lo ocurrido al asegurar que existieron irregularidades financieras que debían ser revisadas y que lo realizado podría constituir una manera de ocultar el verdadero estado financiero del movimiento. Sin embargo, la acusación fue desestimada por la Comisión de Disciplina, órgano encargado de investigar y establecer una resolución.
En efecto, al considerar que no estaban siendo transgredidos los estatutos, no hubo sanciones hacia la Coordinación más allá de que esta última emitiera una aclaración sobre lo ocurrido al movimiento. Así, aunque la comisión sí resolvió que, a su juicio, los miembros de la Coordinación actuaron con efectiva intención de engaño y falta de probidad al incorporar los 60.000 pesos en las cuentas, no hubo mayores sanciones al haberse determinado que las acciones cometidas no constituían faltas estatutarias, pues los estatutos de Avanzar no contemplan sanciones por eventuales faltas de probidad. Cabe destacar, no obstante, que la Comisión fue cuestionada en su legitimidad por parte de los denunciados. Solamente el Coordinador de Finanzas terminó siendo destituido por presunto abandono de deberes, según lo resuelto por la Comisión.
Más allá de las resoluciones formales de la Comisión de Disciplina, El PUClítico se contactó con exintegrantes de Avanzar que estuvieron presentes durante el proceso y que, desde su posición como miembros del movimiento, dieron testimonios de lo que observaron durante el tiempo en que transcurrió la investigación. Al respecto, los exintegrantes —que por motivos de resguardo y protección a sus personas optaron por no ofrecer sus nombres— enfatizaron que el proceso estuvo marcado por malos tratos entre distintos miembros del movimiento, daños a la salud mental y la moral de los involucrados, y hasta hostigamientos reiterados que se realizaron a personas de la Comisión que debía investigar la acusación. Asimismo, fue mencionado cómo costaba mantener el ambiente de respeto y que, durante distintas etapas del proceso, se cuestionó tanto la legitimidad de la comisión como la pertinencia de la resolución final, lo que implicó un desgaste para quienes la conformaron..
Posterior a que se haya emitido la resolución, varios integrantes de la Comisión de Disciplina renunciaron al movimiento. Ningún integrante de la Coordinación o de alguna de las partes involucradas quiso dar declaraciones sobre este proceso.
Una nueva denuncia
A pesar de la resolución anterior, el pasado 11 de junio el Coordinador Interno del movimiento interpuso nuevamente una denuncia al resto de la Coordinación. Esta retomaba la acusación de fraude financiero, añadiendo los cargos de falta de transparencia, acciones anti-estatutarias por parte de la Coordinación, y por haber tomado postura política sin previa consulta con el movimiento, los cuales fueron negados por los denunciados.
La acusación se levantó a una segunda Comisión de Disciplina la cual fue cuestionada en su legitimidad por parte de los denunciados. Aquello, bajo el argumento de que no estaba en concordancia con lo establecido en la primera comisión que determinó que sus resoluciones eran inapelables, por lo que la Coordinación denunciada no consideró que era admisible una segunda acusación que retomara el asunto financiero.
No obstante, la segunda Comisión continuó con sus actividades y determinó establecer una serie de medidas cautelares mientras durase la investigación, entre las cuales se encontraban la destitución temporal de la Coordinación del movimiento, junto con la tenencia total de las redes sociales y correo electrónico del movimiento. Estas medidas, cabe mencionar, no indicaban necesariamente culpabilidad hacia los acusados, sino que buscaban ser meramente preventivas para velar por el debido procedimiento de investigación.
Las medidas fueron cuestionadas por parte de los denunciados por considerarlas ilegítimas, mientras que los denunciantes las defendían pues a su juicio eran acordes a la interpretación que poseían de los estatutos rectores del movimiento. De esta manera, el punto discordante entre integrantes del colectivo radicaba en la legitimidad de la conformación de esta segunda Comisión y la pertinencia de las acusaciones que, para algunos, no poseían fundamento, lo que derivó en continuos conflictos y altercados entre las partes involucradas.
La disputa anterior fue escalando exponencialmente hasta el punto que el pasado jueves 15 de junio (cuatro días después de que se haya levantado la 2da denuncia), el Consejero Territorial por College, Sebastián Venegas, hizo pública su renuncia y desvinculación a Avanzar. “La decisión ha sido tomada por mí, pero provocada por personas que en una batalla de ego han dañado a miembros del movimiento”, explicó en la declaración pública, sin ofrecer detalles sobre lo sucedido. Dado que Renate Rehbein, quien fue electa Consejera Territorial por Ingeniería por Avanzar, había renunciado unas semanas atrás por motivos de salud, el movimiento se quedó sin representación en el Consejo Ejecutivo.
Acto seguido, el Coordinador General de Avanzar Felipe Carrasco y el resto de los integrantes de la Coordinación renunciaron al día siguiente, con excepción de Baltazar Dulcinelli, que se mantuvo en su cargo. Sin que se ofrecieran mayores explicaciones por parte de la Coordinación o del movimiento, Carrasco publicó por sus redes sociales “en conjunto con el 90% de los representantes del movimiento y más de 30 miembros y amigos, decidimos dejar Avanzar. Fue un honor estar 5 años construyendo este movimiento”. Ningún actor de los involucrados quiso dar declaraciones públicas a El PUClítico.
¿Qué depara el futuro?
El pasado sábado 17 se llevó a cabo una reunión general en donde el movimiento deliberó sobre lo ocurrido y el futuro del colectivo de centro liberal de la UC ante la ida de la mayoría de la coordinación y militantes de base, reunión que convocó tanto a miembros vigentes como exintegrantes que dieron sus visiones y opiniones sobre cómo proceder.
Así, con visiones contrapuestas, mientras algunos de los participantes ven en esta situación el fin de Avanzar, otros optaron por tener una visión más optimista, tal que se inclinaron por rearticular el movimiento.
En efecto, así se vio en el comunicado emitido por Avanzar el pasado miércoles 21 de junio en donde, buscando explicar la situación por la cual pasó el movimiento, se pronunciaron para clarificar las filtraciones y especulaciones que se habían estado esparciendo por redes sociales durante esos días. Ante lo anterior, explicaron que por el disenso generado durante el proceso investigativo interno del movimiento, las diferencias existentes entre las partes derivaron en múltiples renuncias y desvinculaciones. No obstante, se enfatizó en que se logró una “resolución pacífica” entre las partes del conflicto a través de los estatutos de Avanzar. Asimismo, dada la información sensible esparcida declararon que “la salud mental y la honra de muchas personas fueron pasadas a llevar y esto es algo que no es aceptable”.
“El compromiso del movimiento liberal de la UC sigue vivo y no dejaremos de trabajar para ustedes (…). Por lo mismo, nos parece necesario ver esta situación como un aprendizaje y una invitación a seguir mejorando, tanto como movimiento y como individuos, para así poder finalmente avanzar”
– Declaración pública de Avanzar.
Actualmente, a pesar de que varios representantes estudiantiles y miembros base se desvincularon del movimiento, alrededor de 100 estudiantes poseen algún tipo de adherencia al mismo. Se espera que prontamente se escoja la coordinación que liderará la rearticulación del movimiento de centro liberal de la UC.