En una convocatoria realizada por la FEUC en coordinación con otras organizaciones estudiantiles, personas presentes recordaron la vida de la joven estudiantes Uandes. Presidenta Jofré asiste hoy a Superintendencia a declarar demandas de salud mental en la educación superior
En el pedestal del monumento al general Baquedano, ubicado en la rotonda de la plaza homónima, se reunieron con velas y carteles en la tarde de ayer 8 de abril las federaciones de estudiantes de la Universidad Católica, la Universidad de Chile, la Universidad Diego Portales, la Confech y el Centro de Estudiantes de Terapia Ocupacional Uandes.
Con fecha 16 de marzo, Catalina Cayazaya, alumna de terapia ocupacional en la Universidad de los Andes, habría de atentar contra su vida después de enfrentar una compleja situación dentro del recinto.
De acuerdo con su madre, Carolina Cors, todo comenzó a inicios de su internado en 2022, donde se encontró con “un lugar en donde está normalizado el maltrato de los internos de las carreras de la salud”. Escenas con insultos y faltas de respeto parecían ser pan de cada día para la joven estudiante quien, en un intento por sanear la problemática, informó al docente a cargo sobre la situación. Fue llamada “sensible”.
Tras lo ocurrido, su madre difundió una carta en la que denuncia abiertamente estos “abusos y tratos injustos” de parte de profesionales de la propia institución. En el documento, además, se hace hincapié en que esto no es un caso aislado, sino que forma parte de un escenario lleno de “maltratos e irregularidades” sufridos por varios alumnos.
La universidad no se pronunció hasta el miércoles 3 de abril, en un comunicado vía Instagram. En él, además de dar su sentido pésame, informan que han “iniciado una exhaustiva investigación para determinar las eventuales responsabilidades”.
Por su parte, la Superintendencia de Educación Superior emitió un oficio a la Universidad de los Andes para que entregue al ente fiscalizador toda información que disponga en relación con el suceso.
En la actividad de ayer la mamá de Catalina tomó la palabra para agradecer a los estudiantes, y amigos presentes.
“Creo que en estos tiempos hay que estar súper acompañados, hay que ser amigos de verdad, estar pendientes de quienes están al lado de nosotros, tomar precauciones con nuestros amigos, con nuestros cercanos, no solo carretear, no solo pasarla bien, sino, preguntarles a nuestros amigos qué sienten, preguntarles cómo han estado sus días. Creo que todos sufrimos diferentes cosas en el día a día y creo que estas ocasiones especiales nos hacen sentir acompañados, y saber y apreciar lo que tenemos al lado, que siempre son nuestras amistades y nuestras familias”, comentó en la velatón Jorge Alegre, amigo de Catalina Cayazaya.
Otra de sus amigas, es Francisca Salazar quien también compartió su relato: “Es verdad que uno entra a un internado y te dicen -ten cuidado con tal tutor porque es muy pesado, -es muy estricto-, -te trata mal- o, un sinfín de cosas; entonces la idea de esto es hacerlo visible, es ser la voz de la Cata que ya no pudo más, y que tomen medidas”.
La presidenta FEUC, Catalina Jofre declaró respecto a la situación vivida en la Universidad de los Andes que esto permite “ver de cerca todo el dolor que nuevamente ha provocado la indolencia de las universidades ante todo el abuso que viven los estudiantes diariamente”.
Respecto a la existencia de incidentes parecidos dentro de la comunidad UC y la actitud de la universidad frente a estos, la presidenta declaró que “la UC no ha invertido suficientes recursos ni esfuerzos en contrarrestar la cultura de la sobreexigencia, la automedicación, la competitividad, abuso y autodestructividad que sus políticas han propiciado, que tienen como efecto muchas veces un daño generalizado a la salud mental de las y los estudiantes”.
Jofré también se refirió a las exigencias que hacen como Federación a las universidades del país: “Debe haber cambio drástico que se traduzca en políticas públicas, que establezca una normativa uniforme, que impida a las universidades dejar en segundo plano el bienestar de los estudiantes. Y no solamente en aquella universidad, sino en todas las universidades de Chile”, agregó.
En la Universidad Católica los alumnos pueden disponer de la Unidad de Salud Mental, servicio universitario ligado al bienestar estudiantil que reúne a 30 psicólogos y 3 psiquiatras.
La Unidad de Salud Mental realiza atención clínica y psiquiátrica a estudiantes con trastornos leves. Dado esto es que los principales problemas abordados por este servicio de bienestar dicen relación con el manejo de la ansiedad, la prevención del suicidio, adaptación al cambio, y la prevención del consumo de drogas.
Siempre existe la posibilidad de que algunos estudiantes requieran formas de ayuda más profundas que las referidas. Por lo que los profesionales de la Unidad de Salud Mental tienen la facultad de derivar a los alumnos que lo requieren a especialistas externos que se adecuen más a las necesidades que exige cada caso
Según la página web de la Unidad, para las atenciones clínicas psicológicas o psiquiátricas, el alumno debe traer un bono de atención FONASA nivel III o un bono de su ISAPRE según corresponda.
Los costos incurridos por la compra de dicho bono serán devueltos por la universidad, directamente a Salud Estudiantil. La devolución se realiza en efectivo hasta un monto de $16.000, o por caja a través de un vale vista del Banco Santander si el monto a reembolsar es mayor. Esto rige para alumnos de pre y post-grado.
Para realizar solicitud de hora médica se debe acercar presencialmente al tercer piso del Hall Universitario en el Campus San Joaquín o llamar a los siguientes números: 955045402, 955045412, y 955045414.