Sr. Director
Podría estar más o menos de acuerdo con Monopolio político UC, pero ese no es el punto; cuando entregas tu opinión y esta no es acompañada por argumentos, respaldo o ejemplos concretos, lo que pierde de credibilidad lo gana en discriminación. Los novatos son dos cosas principalmente: ruidosos y motivados (dicho por un novato del 2004). Son mayoría en sus respectivas facultades y son quienes se motivan a tomar la batuta que muchos experimentados universitarios no se atreven a tomar en cuanto a la participación o las actividades.
Entonces, si están motivados de tomar el lugar que otros no toman, ¿por qué duele tanto que lo hagan? Si les ofrecen un determinado puesto o responsabilidad, también será por algo, como por propuestas inteligentes de seguridad como la red de regreso para gente que vive lejos de la UC, la participación en temas contingentes para la universidad, como lo son las disidencias, o simplemente por ejercer bien un cargo representativo como lo es ser el delegado de generación. No es cuánto tiempo estás en un sitio: es cuánto tiempo le dedicas a este.
Me gusta pensar que detrás de la motivación prematura hay un personaje que quiere ser visto y que tiene mucho que aportar, porque cualquiera puede “chaquetear” al que está en el foco, pero son pocos los que se atreven a pararse frente a este y tomar al toro por los cachos.
Tenemos eventos en los que atraemos a novatos para que vean todo lo que puedan hacer en la universidad y, cuando llegan, los ninguneamos a través de opiniones sin argumentos, respaldos o ejemplos concretos. Si alguien me lo pregunta, eso es discriminación. Si los novatos políticos tienen que cagarla para aprender y ser mejores el día de mañana, que la caguen ellos, y no que los cague el resto.
Santiago Castro Jofré
Estudiante de Periodismo